17 febrero 2013

Un retrato del natural y sight size

A priori, siempre tuve mis reservas con el sight size. Primero, por esta cosa de etiquetar con "nombres-marca" que tiene lo anglosajón. Ya bastante tirria me da usarlo, pero no se me ocurrió una buena traducción. Segundo, y en realidad más importante, siempre me pareció que la idea de trabajar "del mismo tamaño que lo que se ve" era restrictiva y empobrecedora: así que tanto en mi trabajo como en la enseñanza siempre favorecí la proporción relativa. Más libertad, más ejercicio de medir y comparar a ojo.

Ahora bien, hay una parte adicional del trabajo sight size que me venía seduciendo hace tiempo. No aquella parte que precisamente se desprende de su nombre (sight size: pintar o dibujar del mismo tamaño de lo que vemos, para así facilitar la comparación) sino esa otra, casi derivada de la anterior pero no tan inmediatamente asociada, que tiene que ver con el proceso de trabajo que ésta técnica trae aparejada: la idea de ver de lejos (retratado y retrato) allí donde ambos tienen igual dimensión, comparar, tomar decisiones y acercarse a la tela y allí, sin mirar al modelo, plantar pocas pinceladas de acuerdo a lo que hubiera decidido desde el lugar de observación -evitando así pinceladas innecesarias- para luego volver al lugar de observación, comparar, tomar nuevas decisiones, y volver a la tela. Hasta que el trabajo estuviera completado.

Esa segunda parte resultó muy muy fructifera e interesante. Por qué? Primero, por que grita los errores. No te deja negociar con tu cabeza respecto a "esto está mal... bueno, no está tan mal, casi que se parece, bueno, en realidad casi que esta muy bien, está excelente, listo lo dejo así, etc". Si hay algo incorrecto en cuanto a proporción o valor, es muy dificil pasarlo por alto. Por otro lado, ayuda a mantener "the big look", el modelado general, la impresión de la distancia, sin quedarse en detalles minusculos y fotográficos.Te hace ser más selectivo y preciso con las pinceladas. Es dificil quedarse urgando y restregando la pintura porque no vemos al modelo cuando estamos cerca de la tela. Etc, etc, etc.

En definitiva, muy interesante experiencia, que será repetida
Gracias Sendra por prestarse tan amablemente!